
La cantidad de productos que podemos encontrar dentro del mundo de la suplementación deportiva es enorme, no todos ellos con una utilidad demostrada e incluso algunos poco recomendables.
Aquí debemos ser muy rigurosos y utilizar tan solo aquellos productos que esté demostrado científicamente que su consumo, con la pauta adecuada, en primer lugar no supone un riesgo para tu salud; y en segundo, esté probado que pueden ayudarte a asimilar mejor la carga del entrenamiento, bien consiguiendo un mayor aprovechamiento de este, o una mejor y más rápida recuperación, o reduciendo el riesgo de lesión, que si no los utilizas.
Si practicas deporte es importante que conozcas qué sustancias están incluidas dentro de la lista del doping, rechaza su consumo aunque no estés obligado a pasar controles.
Los productos incluidos en estos listados no están ahí por capricho, sino porque te pueden generar graves problemas de salud, tanto física como mental. Enfermedades como alteraciones hormonales, esterilidad, infecciones, tumores, alteraciones cardiacas, diabetes, reacciones alérgicas graves, lesiones renales, lesiones hepáticas... pueden ser causadas por el consumo de los productos incluidos en las listas del doping.
Mi recomendación es que rechaces cualquier producto o práctica que esté dentro de esta lista, tu salud te va en ello, por ningún éxito deportivo merece la pena correr este riesgo.
También es importante que destaquemos esta publicación de la Agencia Estatal Antidopaje www.aea.gob.es en su revista "Newsletter" de septiembre de 2010, «los suplementos nutricionales de procedencia dudosa pueden constituir un riesgo para la salud por la posibilidad de que contengan sustancias dopantes». Debes elegir productos con garantías y si su composición está avalada por la agencia mundial antidopaje, mejor.
Recuerda que no existen productos mágicos que sustituyan un buen entrenamiento, la constancia y el sacrificio, el esfuerzo diario, y el necesario descanso.
Es importante señalar que la suplementación es un complemento de la alimentación, nunca el sustituto de una adecuada y correcta nutrición. La prescripción de la suplementación de un deportista debe estar apoyada en criterios científicos, en los datos de las analíticas de sangre, en los resultados de los tests deportivos, en su peso y composición corporal y en su rendimiento deportivo.
Cabe señalar que un deportista profesional se conoce bastante bien e interpreta, en la mayoría de los casos, con buen criterio las señales subjetivas que su cuerpo le transmite. El médico también debe escuchar la opinión del deportista.
Otro punto muy importante a considerar que se debe tener en cuenta a la hora de planificar la suplementación son los objetivos deportivos, los momentos claves de la temporada, así como su sincronización con el trabajo de preparación física que se esté realizando en cada momento. Por todo ello, el control médico en la prescripción de la suplementación, así como su coordinación con entrenadores y preparadores físicos, es un punto clave.
Si se utiliza la suplementación bajo estos criterios, conseguirás ese extra de energía tan importante en determinados momentos de la competición deportiva, sin que ello suponga un riesgo para tú salud.
Fuente: La Verdad (15-2-11). Autor: Francisco Cuenca, médico especialista en Medicina del Deporte, así como experto en Fisiología del Ejercicio y Alto Rendimiento Deportivo.
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