lunes, 14 de julio de 2008

El dopaje acecha al Tour

Sólo han tenido que transcurrir siete días para que la sombra del dopaje se cierna sobre el Tour de Francia. El ciclista español, Manolo Beltrán, ha sido detenido, esposado como vulgar delincuente, por encontrar restos de EPO en su organismo. El "Triqui" Beltrán está ya al final de su carrera y me cuesta creer que, a estas alturas, haya ingerido tal sustancia (espero que sea su propio organismo el que "segregue" esos niveles anormales de eritropoyetina). El contraanálisis dictará su sentencia pero, de momento, ahí está de nuevo el "matrimonio" deporte-droga.

La droga está presente desde siempre en nuestra vida. Cualquier medicamento es una droga, desde la que tomamos para el "dolor de cabeza" (da "positivo" en cualquier análisis) hasta la que se meten algunos por la nariz, inyectándola o por la boca.

¿Por qué el deportista ingiere drogas? Por favor, dad vuestra opinión en la "encuesta" que hay al margen y así debatimos sobre esta problemática, ahora que se acerca la Olimpiada de Pequín.

Llevando el tema al ámbito escolar, el maestro de Educación Física ha de motivar al alumnado en la práctica de la actividad física saludable, en el esfuerzo y en la superación personal sin "ayudas químicas" y, sobre todo, en la aceptación, que no resignación, de los límites físicos y mentales que cada individuo tiene marcado en su código genético.

Animemos, pues a nuestro alumnado y padres, esto es, a la familia, para que tenga como propios los beneficios que la actividad física saludable produce en nuestro organismo, íntegramente. La tarea no es fácil, pero merece la pena.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

desde luego, qué poca vergüenza...

Güisy Pérez-Cuadrado Señoráns dijo...

Hola Ful! Gracias por estar siendo la persona que busco cada día desde que te conozco para encontrar en ti ese apoyo y esa comprensión. Tu compañía me satisface plenamente. Somos fuego. Eres mi café, el que tomo 2-3 veces al día, y..me estimula, me exalta, me anima, me da tono. Gracias por entrar en mi "diario" y ser tan fiel. Gracias por esperar a sentir la falta de presión, y a alertar los sentidos para encontrar ese dedo rozándote el brazo llevándose el calor que desprendes, tú sabes...

Gracias por estar a ese otro lado, donde no alcanza la mano para tocarte, pero, con los sentimientos si conectamos, es nuestro roce...

Gracias por tu ESTAR, conmigo.

Un abrazo de tu amiga.